Como mi amigo Ignacio pidió algo mas alegre , pues trataré de complacerle con este nuevo engenndro de mis atribuladas vivencias; con el que me divertí mucho cuando en un alarde de jugar con las palabras , traté de enlazar las ultimas palabras de uno o varios versos con las siguientes de inicio de verso( mira por donde Principio y fin de nuevo).
El experimento me gustó tanto que no descarto la posibilidad de hacer mas clones ...
La queda mirada de un pez en su pecera
Amor, no quiero morir en Roma
En romántica espera ...
Esperanza, sosiego y paciencia
Aún me quedan.
Me quedan tus silencios
Y a veces tus ausencias.
Tus ausencias de amar,
De amargura y de pena.
De pena por no querer,
Por no querer que te quiera.
Que te quiera yo amar.
A Marte yo iría a buscarte.
A buscar té para tomar.
Tomar de tu boca un beso...
Un beso y mil te he de dar,
Porque siento mucho amor.
Amordázame a tu boca
Y desata mi pasión.
Mi pasión me hace llorar,
Lagrimas sabor a mar.
Amar y entregarme todo,
Todo lo eres para mí.
Para mí la llaga abierta,
Abierta por el dolor.
El dolor cuando no estás.
Estás en mi corazón.
Corazón ¡Cómo te quiero ¡
Té quiero con un terrón.
Te rondaba yo un día,
Hundiame en tu alma yo.
Llovía, siempre llovía.
Yo vi. un día salir el sol.
Sólo, me quedo dormido ,
Dormí dos días solo amor.
Amoratados los ojos ...
De llorar, ¿ De qué si no?
José María Montejo
4 comentarios:
Tu amigo Ignacio pidió algo mas alegre pero nos hiciste una trampita, Número Uno. Empezamos bien no queriendo morir en Roma, pero terminamos con los ojos amoratados de llorar, ¿de qué si no?.
Bien ahi!
Muy dada lo tuyo.
Casi casi escritura automática.
Gracias amiguetes.
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